Esto es Noti-Rana®, una mirada fría a las noticias, un producto de La Rana Homeoterma SRL y de su creador, editor, transcriptor, productor ejecutivo, corrector, secretario, bedel y chofer, Luis E. Marval Hidalgo, y llega a ti por trampa, porque no has pedido ni quieres tener este pasquín en tu vida ya que tú tienes cosas más importantes, educativas e interesantes que leer.
Recuerde, manténgase desinformado, lea Noti-Rana®.
RANINTERNACIONALES
***URGENTE. BOMBARDEO A INSTALACIONES EN TEHERÁN***
Desde Florida, Estados Unidos, se informó de un
bombardeo nocturno que destruyó totalmente instalaciones en Teherán. En entrevista
exclusiva para Noti-Rana®, la portavoz de Florida en Homestead, Scarleth
Trillo, dio en primicia declaraciones a
nuestro enviado especial, el reportero Nunca Escampa Hidalgo, de los recientes
hechos.
NUNCA
ESCAMPA) —Sra Trillo, ¿nos puede explicar por qué se efectuó ese bombardeo a
Teherán y qué se sabe de ello?
(SCARLETH
TRILLO) —A mí me había dateado mi prima Carlota Judith que el marido mío tenía
un bochinchito en la avenida Teherán, por allá por los lados de Montalbán, en
Caracas. Él tenía todo encubierto con el cuento de que el jefe lo llamaba para trabajos de noche. Junto con mi aliada Carlota y su esposo, Jimmy Cleaning,
le montamos cacería a Luis y confirmamos que el muérgano ese estaba enriqueciendo
a Urania —una fulana que se la da de mosquita
muerta— con dinero, regalos y hasta un apartamento que le alquiló a la zorra esa
en la Av. Teherán. Averiguamos dónde se enconchaban esos dos desgraciados y activé
la Operación Midnight Estrujón: esperé a que Luis se fuera ique
a otra reunión nocturna de trabajo con su jefe y raspinflai me fui a
media noche volando en mototaxi, en total
silencio, sin transpondedor, hasta Teherán. Toqué la puerta de la instalación y
cuando me abrieron les di con todo el arsenal que yo llevaba: a ella la esmoñé,
con el primer golpe le volé las carillas dentales de Composite® que usaba en el
tren delantero, con la segunda cachetada quedó virola y le saltaron los
zarcillos y las pestañas postizas de putorra que usaba y con el bofetón final
la dejé caminando grogui tratando de recostarse contra las cuerdas del tendedero
de ropa portátil que estaba allí con pantaletas colgadas. Mientras ella zigzagueaba
sin brújula, yo me le fui encima al muérgano de Luis que no había reaccionado
porque lo agarré descuidado en interiores. Agarré una cartera Cacharel® que él
le acababa de comprar y que estaba sobre el sofá y le di un soberano sopapo en
la jeta que lo dejó con las piernas tembleques. Seguí dándole carterazos hasta que
de la cartera no quedó ni la "Ca" de Cacharel® y él estaba tan
mareado que no lograba saber de dónde le venía la zaparapanda de golpes que yo
le lanzaba ni lograba protegerse para que yo no le siguiera dando candela. Luego
vino el bombardeo inteligente: ceniceros, candelabros dorados, cubiertos de
plata, vasos de vidrio de Cheez Whiz® de Kraft®, bombillos led chinos, un control
remoto con su televisor Samsung de 200 pulgadas, una lámpara persa, souvenirs
de los sitios que habían ellos habían visitado juntos…. No quedó en pie nada en
esa sala, luego me fui al cuarto… Allí quedaron los restos de los espejos con
que tenían forrados paredes y techo. A un cubrecama rosado de zorra que vestía
la cama lo volví jirones al igual que a las almohadas con fundas bordadas con corazoncitos
de amor. También rodaron frascos de perfumes (tirados o rotos sobre el suelo),
lociones corporales, cremas hidratantes, pinturas de bemba, talco de totona,
collares, anillos de fantasía, fotos donde los dos aparecían acaramelados y no pare
usted de contar. Lo que no caía al suelo de la habitación volaba por la ventana
como cohete de SpaceX rumbo a la entrada del edificio, incluyendo a un perrito
poodle que —ahora que me acuerdo— no era de peluche. La furcia esa se
apareció bamboleante en la puerta del cuarto y un perfume-misil de Ives Saint Laurent®
teledirigido sin dron le atiné en el coco, dejándola fuera de combate, y otro
misil, de perfume Armani®, le dio en la frente a él, noqueándolo. La
instalación de Teherán quedó desarticulada y pasarán varios años para que
vuelva estar operativa. La policía llegó y yo admití la responsabilidad y que
el bombardeo lo efectué sin aviso ni protesto. Ella, ya recuperada, gritaba que
me demandaría, y el muérgano de mi marido insistía en calmarla para que no pusiera
demanda ni se supiera todo porque, de paso, allí supe que ella era transexual.
(NUNCA
ESCAMPA) —¿Y no teme a las repercusiones que esto pueda traer para usted?
—En
lo absoluto, ya Teherán dejará de ser una piedra en el zapato para mí y para la
humanidad. Ahora saben que yo sí voy en serio, nada de negociaciones ni dar
vueltas en círculo como perro tratando de morderse la cola. También es una
enorme advertencia para otros que quieran enriquecer a Urania, tal como dijo Jimmy
Cleaning.
—¿Y
su marido está bien?
—Sí.
Está bramando, pero hasta ahora solo reportan daños materiales en esa instalación,
no hubo lesionados ni pérdidas humanas que lamentar.
—¿Y
su prima Carlota participó del bombardeo?
—Claro
que yes. Fue mi aliada estratégica y lanzó uno que otro misil, pero no
fueron tan grandes como los que yo usé. Eso sí, con esto ella aprendió el juego
del bombardeo y le alertó a Cleaning: "cuando veas las bardas de tu
vecino arder, pon las tuyas en remojo".
Nunca
Escampa Hidalgo
Noti-Rana®
23-jun-2025
Luis E. Marval Hidalgo
Distraerse un poco con un asunto tan serio como la guerra 🤔
ResponderEliminarGracias por tu comentario, Rubén. Por cierto, ¿cuál guerra? Esto es la narración de un episodio matrimonial de cuernos neutralizados muy frecuente desde el precámbrico. Ji, ji, ji
ResponderEliminarPrefiero esta versión de la guerra, es más jocosa. Se nos olvida por un instante que hay mucha gente inocente muriendo. Saludos
ResponderEliminarMuchas gracias, Milla. Ojalá las guerras fuesen como la de esta narración: sin víctimas, solo anecdóticas y risibles.
ResponderEliminarComo siempre, muy buenos los Noti-Rana, el humor fortalece el espíritu, gracias por compartir
ResponderEliminarGracias, María E., por leerlo y por tu comentario
ResponderEliminarNo pude parar de reír. Luis te va a matar por revelar sus secretos jajajaja
ResponderEliminarMuchas gracias, Alejandro. Luis ni Scarleth leen Noti-Rana®
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